En El Último Fremen abrimos una nueva sección dedicada a bandas de rock infravaloradas de la mano de The_Mime: «Como primera entrada, me gustaría abrir una pequeña sección sobre bandas que han sido eclipsadas por un solo disco o incluso una sola canción y que el resto de su discografía no ha sido valorada como se debía».
«bandas que han sido eclipsadas por un solo disco o incluso una sola canción»
Extreme
Este es el caso de Extreme, una banda americana de Hard Rock, con toques ‘funk’ que se hizo mundialmente famosa a finales de los 80. Esta banda cuenta con uno de los mejores guitarristas (si no el mejor) del mundo del Heavy Rock, con un gran vocalista que llegó a grabar con Van Halen, con un excelente bajista a la vez que corista y actualmente a la batería cuentan con un discípulo del gran Mike Mangini, el cual también llego a formar parte de la banda.
La canción maldita
El éxito de la banda llegó de la mano de la (magnífica) balada More Than Words, perteneciente a su también grandioso álbum Pornograffitti.
More Than Words se hizo tan popular, que no se valoró el resto del álbum como debía ser, un álbum que roza la perfección. Temas como Get The Funk Out, Decadence Dance, It’s (a Monster)… (y así podríamos nombrar, una a una, cada canción del disco) son una buena muestra de que estamos ante uno de esos discos que todo amante del rock debería tener en casa. Sencillamente maravilloso.
Su trayectoria
El problema vino con que el siguiente álbum no llegó al nivel de Pornograffitti, tarea casi imposible. Pero no por ello III Sides to Every Story deja de ser un muy buen disco. De hecho canciones como Rest In Peace, Cupid’s Dead o Am I Ever Gonna Change muestran un nivel muy alto, en mi opinión, muy por encima de la mayoría de las bandas de la época.
Pocos años después llegó su cuarto álbum, Waiting For the Punchline, con un cambio de sonido, debido a la llegada hacía pocos años del grunge y a la necesidad de los ‘viejos‘ rockeros de cambiar un poco de aires. El disco no funcionó, y jamás entenderé el porqué (más allá de que cada uno tiene su propio gusto). Porque el disco muestra calidad por todos lados. La maravillosa Hip Today continua con el legado de los de Boston, al igual que la preciosa balada Unconditionally. Sin embargo, canciones como There is No God, No Respect o Cynical entre otras tantas, tienen un sonido más crudo y potente, pero siguen teniendo una calidad altísima.
El regreso
La cosa quedó ahí. Pero tras 13 años de separación, en 2008 regresaron con el genial y hasta ahora último disco, Saudades de Rock, que, aunque en mi opinión está por debajo de su corta discografía, contiene grandes himnos como Star, Comfortably Dumb o Run, manteniendo el álbum en un nivel notable.
Y no nos podemos olvidar de su primera y homónima obra Extreme. Con un sonido más glam ochentero, con claras influencias de Aerosmith, Queen o Van Halen (que se mantienen en el resto de su discografía) pero que contiene grandes temas que muchos desearían grabar en su primer disco. Kid Ego, Wind Me Up o la virtuosa y genial Play With Me ya apuntaban maneras, y mostraban el gran potencial que tenía la banda.
Ahora solo queda esperar que tras más de 10 años anunciando nuevo disco, Kevin, Pat, Gary y Nuno se dignen a dejarnos escuchar su siguiente larga duración, que estoy seguro no dejará indiferente a nadie.